La serenidad se manifiesta cuando abandonamos nuestras expectativas y abrazamos la aceptación, una sabia lección enseñada por los venerados Orishas, bajo la tutela amorosa de Olodumare, el Creador Supremo. En el tapiz sagrado de la existencia, descubrimos que la auténtica paz no yace en imponer nuestras voluntades, sino en armonizarnos con el flujo divino de la vida, conforme nos guían los Orishas, en alineación con la voluntad de Olodumare.
La aceptación, iluminada por la sabiduría ancestral de los Orishas, nos libera del peso de nuestras exigencias y nos permite danzar con gracia en el ritmo cósmico del universo. Es un acto de humildad y devoción, donde reconocemos la omnipresencia y omnisciencia de los Orishas, reflejos de la voluntad divina de Olodumare, en cada rincón del cosmos.
Nos invita a fluir con la corriente de la existencia, confiando en la dirección y protección de los Orishas, en consonancia con el plan divino trazado por Olodumare, en lugar de resistirnos con terquedad a las mareas cambiantes de la vida. En este fluir consciente, descubrimos una fortaleza que emana de nuestra conexión sagrada con lo divino, una fortaleza que trasciende las vicisitudes terrenales.
La paz interior, entonces, no es un estado estático que se busca afuera, sino una comunión profunda con el Espíritu, alimentada por la presencia amorosa y orientadora de los Orishas, reflejos de la voluntad y el amor de Olodumare, en nuestras vidas. Al aceptar esta conexión sagrada, nos abrimos a una comprensión más profunda de nuestro propósito y destino espiritual, en armonía con el plan divino de Olodumare y la guía sabia de Orunmila.
Este viaje hacia la aceptación es una invitación sagrada para aquellos que anhelan vivir en armonía con el cosmos y experimentar la plenitud espiritual. Requiere coraje para soltar el control y confiar en la sabiduría divina de los Orishas, así como humildad para reconocer nuestra posición como hijos e hijas de Olodumare, bajo la tutela sabia de Orunmila, quien nos brinda su guía certera y su sabiduría profunda para interpretar el destino.
Que cada uno de nosotros encuentre la fuerza y la fe para embarcarse en este viaje, no solo en beneficio propio, sino también como un acto de servicio a la comunidad y al mundo en su conjunto. En la aceptación de nuestra conexión con los Orishas y en sintonía con la voluntad de Olodumare, encontramos el camino hacia la verdadera paz y serenidad, así como el florecimiento de nuestro espíritu hacia su plenitud divina.
PS. Que siempre estemos atentos a las señales y mensajes de los Orishas, y que su ache nos guíe y proteja en todo momento, en armonía con la voluntad de Olodumare y la sabiduría de Orunmila. Ashe.